El poder invisible de lo cotidiano
- Marianella Mendez Badell
- 9 abr
- 1 Min. de lectura
No son las grandes decisiones las que construyen la cultura, sino las pequeñas elecciones diarias que hacemos sin darnos cuenta.
La mayoría de los líderes hablan de compromiso, propósito o transformación… pero con sus micro acciones y decisiones cotidianas envían señales contradictorias.
Esos pequeños actos, inadvertidos, que reflejan lo que realmente valoramos, priorizamos y promovemos, que no siempre están en los discursos, pero sí en las acciones, son parte del liderazgo inconsciente, generando desmotivación, desconexión o desconfianza:
Interrumpen una conversación por responder un mensaje “urgente”.
Comienzan la reunión sin saludar ni preguntar cómo están los demás.
No reconocen el esfuerzo ... “es parte del trabajo”.
Hablan del equipo en plural solo cuando hay errores.
Dan feedback solo cuando hay problemas.
Postergan conversaciones importantes por “falta de tiempo”.
Ninguna de estas acciones es malintencionada. Pero todas dejan huella.
Una cultura de compromiso no se erosiona por una gran crisis… se desgasta lentamente por estas pequeñas señales de desconexión emocional.
El liderazgo consciente: micro decisiones que construyen y son transformadoras
Miran a los ojos y escuchan con atención.
Celebran un pequeño avance, incluso si no es perfecto.
Piden ideas y opiniones y las ponen en práctica.
Admiten con humildad cuando no tienen todas las respuestas.
Preguntan con intención: “¿Cómo te estás sintiendo en este proceso?”
Estas acciones solo requieren presencia, conciencia y humanidad.
Son decisiones que alinean “el decir con el hacer”.